CONCLUSIÓN
A lo largo de este tema se ha dicho que no es posible hablar de “verdades objetivas”, entonces ¿se puede inferir que todo es subjetivo? Como bien lo explica Echeverría, “no se niega la existencia de una realidad objetiva. Sólo se niega la posibilidad de un conocimiento objetivo de esa realidad, de un conocimiento que sea independiente del observador que la observa”.
Los seres humanos dada nuestra biología y la historia personal, familiar y socio-cultural, solo podemos hacer interpretaciones de lo que observamos. Por lo tanto, es de gran relevancia aprender a elegir entre las diferentes interpretaciones que pueden surgir en relación con una situación en particular. Tal elección está basada en su poder de acción, bienestar y respeto que nos ofrece. Aprender a observar dichos criterios en las diferentes interpretaciones que surgen de cara a una realidad, es una gran oportunidad de transformación personal, profesional y de liderazgo dentro de una organización.
A continuación encontrarás una actividad de centramiento asociado con tu corporalidad; te invitamos a realizar el ejercicio durante la semana y generar tus propias reflexiones.